Marína nos cuenta su proceso hacia el ejercicio profesional de la Naturopatía y la lucha por los derechos profesionales de los Naturópatas en Bélgica:
Desde mi infancia he sido iniciada por mi madre para escuchar el cuerpo y su lenguaje. Las curaciones y el cuidado que me aplico cuando me encontré un poco "mal con mi resfriado" me ayudó a ver que el acompañamiento de la salud con las herramientas de la naturaleza ofrece la posibilidad. Preservar, restaurar el cuerpo y sus funciones de manera eficiente respetándolo.
El sol, el agua, la tierra, el aire, los ayunos y otras mono-dietas han formado parte mi vida y han forjado mis hábitos y mi experiencia en el mantenimiento de la vitalidad. Aprendí muy temprano "el diálogo con el cuerpo" comprender sus "males" y los traduce en palabras ...
Al llegar a Europa a la edad de 21 años, hice una incursión que fue decisiva para mí en el campo de la Naturopatía europea.
De hecho, al tener aquí, ni los mismos elementos naturales, ni el mismo clima y mucho menos la misma comida, comencé a buscar a alguien que me guiara y me aconsejara como preservar y mantener mi salud en general. Estos nuevos parámetros desconocidos para mí en ese momento. Entonces tuve la oportunidad de conocer a Daniel Kieffer, Naturópata apasionado y fundador de CENATHO, donde, unos años más tarde, seguí mi formación.
Fuerte y enriquecida de estas experiencias y de todas estas lecciones, es un placer continuar este trabajo de orientación, acompañamiento y transmisión de este conocimiento aprendido primero en la tradición familiar, luego a través del estudio, el contacto con profesores apasionados, comprometidos y competentes en el campo de la salud natural.
Fuente: marinafernadezcano
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