Investigaciones recientes han demostrado que la danza, específicamente el tango, puede ser una estrategia adecuada y efectiva para mejorar los déficits de movilidad funcional en personas frágiles y de edad avanzada.
Las personas con enfermedad de Parkinson (EP) experimentan disminuciones en la movilidad funcional que pueden ser incluso más pronunciadas que las que experimentan los ancianos frágiles sin EP.
El propósito de este estudio fue comparar los efectos de dos programas de movimiento: clases de tango o clases de ejercicios.
Diecinueve sujetos con EP fueron asignados aleatoriamente a un grupo de tango o una clase de ejercicio en grupo representativa de las clases actuales ofrecidas en nuestra área geográfica para individuos con EP.
Los sujetos completaron un total de 20 clases de tango o ejercicio y fueron evaluados la semana anterior y posterior a la intervención.
Ambos grupos mostraron mejoras significativas en la puntuación general de la Escala de Clasificación de la Enfermedad de Parkinson Unificada (UPDRS, por sus siglas en inglés) y mejoras no significativas en la Congelación de la marcha autoinformada.
Además, el grupo de tango mostró mejoras significativas en la Escala de Balance de Berg. El grupo de ejercicio no mejoró en esta medida.
Finalmente, el grupo de tango mostró una tendencia hacia la mejora en la prueba Timed Up and Go que no se observó en el grupo de ejercicios.
Se necesitan estudios futuros con una muestra más grande para confirmar y extender nuestra observación de que el tango puede ser una intervención eficaz para abordar los déficits de movilidad funcional en individuos con EP.
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