Un hongo de larga vida.
Cordyceps ha sido incluido en la fitopea china desde el siglo XVII, pero se conoce desde hace más de 2000 años como un poderoso tónico muscular y afrodisíaco.
Por esta razón, además, estaba reservado para el Emperador de China y su corte. Un estudio realizado en 2004 en ratones machos mostró que este hongo aumentaba significativamente la testosterona, lo que particularmente promueve la erección
Desde entonces, numerosos estudios han demostrado que este hongo también hace posible regular la inmunidad, lo que lo hace útil también en caso de reacción alérgica (asma, fiebre del heno, por ejemplo), y de caída inmune.
Un poderoso protector de hígado.
En este hongo, se ha aislado una sustancia, la cordycepina, que permite aumentar la actividad de dos enzimas hepáticas, la superóxido dismutasa y la glutatión peroxidasa, que combaten los tóxicos y especialmente los radicales libres. Esto hace que los cordyceps un notable antioxidante.
Un estudio de ratas en 2003 también mostró que este hongo protegía las células hepáticas de sustancias tóxicas como el etanol. Dos poblaciones de ratas recibieron alimentos suplementados con etanol para crear condiciones para la cirrosis.
La primera población de ratas recibió un placebo, y la segunda, cordyceps. Se ha encontrado que cordyceps puede retrasar la aparición de la cirrosis, o incluso evitarla, y por lo tanto desempeñar un papel de protector del hígado.
Cómo y por qué tomar los cordyceps.
Este hongo puede ser utilizado primero por cualquiera que necesite fortalecer sus defensas inmunológicas o regularlas, así como para aquellos que desean mejorar su rendimiento físico, especialmente los atletas.
Entonces, este hongo es útil en la suplementación en personas que tienen una debilidad inmunológica, como un estimulador inmunológico y protector del hígado. También podemos recomendar esta cura de hongos un mes por trimestre o semestre, simplemente para mantener el campo de la salud.
Finalmente, las personas con alergias respiratorias pueden tomarlo como medida preventiva. Por ejemplo, las personas propensas a la fiebre del heno pueden hacer cordyceps durante uno o dos meses, de marzo a abril o de abril a mayo, según los períodos habituales de brotes de alergia al polen.
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