En el IV Simposio Europeo de Naturopatía, celebrado el 1 de abril de 2023, Manuel Navarro presentó una ponencia titulada "El Criterio Naturopático en la Escolástica: La Regula Vitae". Esta ponencia exploró la intersección entre la filosofía escolástica medieval y los principios de la Naturopatía, destacando cómo la Regula Vitae (Regla de Vida) de los benedictinos influyó en la práctica de la salud natural. Este artículo resume los puntos clave de la ponencia y analiza su relevancia en el contexto de la Naturopatía moderna.
La Escolástica y la Naturopatía
La escolástica, derivada del término latino scholasticus, se refiere a la doctrina teológica y filosófica medieval que buscaba integrar la fe cristiana con la razón, apoyándose en la filosofía grecolatina. Figuras como Anselmo de Canterbury, Guillermo de Ockham y Tomás de Aquino fueron representantes destacados de este movimiento. La escolástica no solo fue una corriente filosófica, sino también un método de enseñanza en universidades y escuelas catedralicias.
En el contexto de la Naturopatía, la escolástica proporcionó un marco conceptual para entender la salud como una armonía entre el cuerpo, la mente y el espíritu. La Regula Vitae de los benedictinos, que enfatizaba la vida en armonía con las leyes de la naturaleza, se convirtió en un pilar fundamental para la práctica Naturopática.
El Movimiento Monástico y la Salud
Durante la Edad Media, los monasterios se convirtieron en centros de saber y enseñanza sobre salud. Los monjes no solo transcribían y conservaban textos médicos antiguos, como los de Hipócrates y Galeno, sino que también cultivaban remediso herbales y elaboraban preparados sanadores. Este entorno favoreció el intercambio de conocimientos científicos y la aplicación práctica de la Naturopatía.
Una de las órdenes monásticas más influyentes en el desarrollo del criterio Naturopático fue la de los benedictinos. Su Regula Vitae integraba la diaita griega (higiene de vida) con una clara influencia religiosa, considerando la naturaleza como una creación divina que debía ser respetada y vivida en armonía.
La Regula Vitae y la Práctica Naturopática
La Regula Vitae benedictina establecía que vivir de acuerdo con las leyes de la naturaleza era vivir de acuerdo con las leyes divinas. Este principio se reflejaba en la práctica de la vida monástica, donde la salud dependía de la armonía con la naturaleza como creación divina.
Un ejemplo notable de esta práctica es la vida de Hildegarda de Bingen, quien, a pesar de sus problemas de salud, actuaba como sanadora para los demás. Hildegarda consideraba a la persona en su totalidad: física, psíquica y espiritual. Su enfoque holístico incluía el uso de la herbología, la escucha activa y la oración, integrando la sanación del espíritu con la del cuerpo.
La Influencia de la Escolástica en la Naturopatía Moderna
La ponencia de Manuel Navarro subrayó cómo la escolástica y la Regula Vitae benedictina han dejado una huella duradera en la Naturopatía moderna. La idea de que la salud es el resultado de vivir en armonía con la naturaleza sigue siendo un principio central en la práctica Naturopática. Además, el enfoque holístico que considera la unidad de la persona sigue siendo relevante en la actualidad.
Conclusión
La ponencia de Manuel Navarro en el IV Simposio Europeo de Naturopatía ofreció una valiosa perspectiva sobre la relación entre la escolástica y la Naturopatía. La Regula Vitae benedictina, con su énfasis en la armonía con la naturaleza y la integración de la fe y la razón, proporciona un marco conceptual rico para la práctica de la Naturopatía. A medida que la Naturopatía continúa evolucionando, los principios escolásticos siguen siendo una fuente de inspiración y guía.
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