Aceite de Ricino y cataratas relacionadas con la edad, un caso de aplicación de la Pirámide Terapéutica; por Mary Fu, estudiante de Naturopatía y Jennifer Brusewitz, Naturópata ND

La Pirámide Terapéutica describe los principios filosóficos fundamentales de la Naturopatía y sirve como una fuerza guía en su práctica moderna (Figura 1). 1 El siguiente caso ilustra el uso de aceite de ricino tópico, en el contexto de la Pirámide Terapéutica, para la catarata relacionada con la edad en un varón de 68 años. Este paciente, como muchos de nuestros pacientes, vino a nosotros ya comprometido con intervenciones continuas de orden superior. Su caso es notable, sin embargo, en que él depende de ellos para la función del órgano. A pesar de esto, está decidido a trabajar dentro de las capas fundamentales de la Pirámide Terapéutica para mejorar su visión y su salud general.

EL PACIENTE

Nuestro paciente es un hombre tetrapléjico de 68 años que se presentó por primera vez en nuestra clínica para recibir tratamiento para la catarata del ojo derecho, un diagnóstico que realizó su oftalmólogo cinco años antes. Informó una disminución notable en la visión después de un período de hospitalización de 7 meses después de una complicación quirúrgica. Posteriormente, experimentó dificultad progresiva para ver pantallas de computadora y leer libros, debido a la disminución de la agudeza visual y el aumento de la sensibilidad a la luz. En el momento de la presentación, ya le habían recetado varios pares de gafas para corregir su visión, sin éxito.

Su historial médico pasado fue significativo para una serie de eventos cardiovasculares y pulmonares asociados con la parálisis. Sin una circulación sanguínea y linfática adecuada para suministrar nutrientes y oxígeno, los vasos pequeños de los riñones y los ojos son los primeros en ser impactados. Además, estaba siendo tratado con múltiples medicamentos que ayudan a mantener la función del órgano pero que también tienen efectos adversos, particularmente en la salud de los ojos. Estos medicamentos incluyen alendronato (fotosensibilidad, uveítis), pregabalina (visión borrosa), baclofeno (ambliopía) y amiodarona (alteraciones visuales, fotosensibilidad). Los efectos del uso a largo plazo de amiodarona en la salud visual son quizás los mejor investigados e incluyen disminución de la agudeza visual debido a neuropatía óptica, edema del disco óptico y depósitos corneales, que en algunos casos también causan visiones de halos alrededor de las luces.

El examen visual en su visita inicial reveló OD 20/100, OS 20/50, OU 20/50. El reflejo rojo estaba presente bilateralmente, lo que indica una presentación leve de la catarata, y los reflejos pupilares directos y consensuados se vieron disminuidos .

CATARATA RELACIONADA CON LA EDAD

La catarata es la principal causa de ceguera en el mundo, y representa la mitad de todos los casos. Se estima que la incidencia de cataratas a 10 años es del 54% para una población de EE. UU. Entre 43 y 86 años.

El desarrollo de cataratas relacionado con la edad es indoloro y la disminución de la visión es progresiva. La lente está compuesta de células epiteliales estratificadas que están dispuestas en una estructura ordenada pero altamente compleja. Es rico en proteínas cristalinas citoplasmáticas, que imparten transparencia a la lente. A diferencia de otros epitelios, la lente no elimina sus células no viables y es más susceptible a los efectos degenerativos del envejecimiento y el daño foto-oxidativo. La mayoría de los factores de riesgo son estresantes ambientales y de estilo de vida que aumentan la carga tóxica y agotan los antioxidantes naturales del cuerpo, incluyendo la edad, el tabaquismo, el consumo de alcohol, la exposición excesiva al sol, hábitos de vida deficientes como desnutrición e inactividad física, síndrome metabólico y diabetes mellitus, exposición al plomo, trauma e infecciones oculares, y el uso de medicamentos tales como corticosteroides sistémicos y estatinas. Entre estos, los factores de riesgo más significativos de nuestro paciente incluyeron su avanzada edad, inactividad física, compromiso de órganos y el uso de fármacos que afectan negativamente la visión y la salud ocular.

Actualmente, el tratamiento estándar de la catarata es la implantación de lentes intraoculares para restaurar la visión normal. Este procedimiento quirúrgico generalmente se realiza cuando la disminución de la agudeza visual ya no se puede corregir con gafas y comienza a afectar significativamente las actividades de la vida diaria (AVD).

ACEITE DE RICINO Y SALUD OCULAR

El aceite de ricino, que se extrae y procesa a partir del ricino Ricinus communis , es un remedio tradicional cuyo uso terapéutico se remonta al menos al 1550 aC. Primero fue descrito como usado en forma de gotas para los ojos para proteger los ojos de la irritación. Entre sus propiedades curativas, el aceite de ricino es notable por su capacidad para calmar la inflamación y promover la circulación linfática. Se ha utilizado tanto externa como internamente para una amplia variedad de afecciones, desde la inflamación de las articulaciones hasta los fibromas uterinos. El uso de aceite de ricino, especialmente como la compresa calentada que conocemos hoy, se popularizó con el trabajo de Edgar Cayce (1877-1945), un místico estadounidense.

En los últimos años, los estudios sobre el uso del aceite de ricino para los ojos han descubierto que ayuda a la reformación de la capa lipídica de la película lagrimal y evita la evaporación de la película lagrimal existente. También aumenta la capacidad de lubricación de las gotas oculares y mejora la función de la glándula meibomiana en pacientes con disfunción de la glándula. Varias gotas para los ojos comerciales hoy incluyen el aceite de ricino como uno de sus ingredientes activos. Está bien establecido que una película lagrimal saludable es importante para suministrar nutrientes y oxígeno al ojo, prevenir infecciones y optimizar la visión. Aprovechamos estas propiedades medicinales del aceite de ricino en una aplicación tópica para nuestro paciente con cataratas leves.

TRATAMIENTOS BASADOS ​​EN LA PIRÁMIDE TERAPÉUTICA

Iniciamos varios tipos de intervención en la primera visita al consultorio de nuestro paciente, trabajando principalmente dentro de los 3 niveles inferiores de la Pirámide Terapéutica. Estos incluyen nutrición, aceite de ricino y remedios homeopáticos (Figura 1).

El primer paso de la Pirámide Terapéutica es eliminar los obstáculos a la salud, que comúnmente incluyen dieta y sueño deficientes, hábitos sedentarios, estrés excesivo, apoyo social inadecuado y desarmonía espiritual. Como se discutió anteriormente, el paciente presentó varios obstáculos para la curación, en particular la parálisis y la dependencia de medicamentos farmacéuticos. Sin embargo, él ya había establecido muchos elementos de la capa fundamental de la Pirámide Terapéutica. Se jactó de una sólida red de apoyo social compuesta por familiares, cuidadores y amigos de la infancia desde hace mucho tiempo. También era consciente de tomar sol y aire fresco todos los días a pesar de sus limitaciones físicas, y tenía pocas quejas de sueño. Además, vino a nosotros comiendo una dieta nutritiva a base de plantas de frutas y verduras, grasas saludables y proteínas. Construimos sobre esta base al recomendar que aumente su consumo de bayas y tomates. De manera similar, se encontró que la vitamina C, en dosis de al menos 1000 mg diarios, resultaba en una disminución significativa de la progresión de cataratas, con solo un puñado de pacientes que requirieron cirugía durante el período de estudio de 11 años.

Luego ascendimos a la pirámide para estimular los mecanismos de curación innata del cuerpo . Esto generalmente se logra a través de una variedad de terapias suaves que promueven la curación de todo el cuerpo, como la hidroterapia, la homeopatía, la acupuntura y la meditación. En este caso, empleamos el uso de aceite de ricino por sus propiedades emolientes y su capacidad para promover la circulación. Recomendamos aplicar 1 gota de aceite de ricino en el canto interno de cada ojo cada noche antes de acostarse, con el objetivo de permitir que el aceite trabaje durante la noche sin el efecto secundario temporal de la visión borrosa. El soporte simultáneo incluyó hidroterapia de contraste en forma de compresas alternas tibias y frías para los ojos, lo que ayuda a aumentar el flujo sanguíneo y mejorar aún más la entrada de nutrientes y la eliminación de desechos.

A veces puede ser necesario para apoyar los sistemas de órganos que se han debilitado o dañado de una enfermedad de larga duración y de una vitalidad reprimida. La medicina botánica, las prescripciones nutricionales específicas, así como las modalidades mencionadas anteriormente tales como remedios homeopáticos, se encuentran entre las muchas terapias dirigidas disponibles. Usamos homeopáticos combinados de baja potencia que abordan sistemas específicos de eliminación de órganos. Funcionan de forma sinérgica con otras terapias para garantizar que el paciente pueda descargar las toxinas acumuladas a través de 1 de 4 emungtorios primarios: piel, intestinos, pulmones y el sistema urinario. Nos enfocamos principalmente en apoyar la función del hígado como sede de la eliminación y la clasificación de los desechos mediante el uso de remedios que funcionan a nivel celular para aliviar la congestión hepática. También apoyamos la función renal del paciente en su papel vital en la filtración de sangre.

Además de los remedios homeopáticos, el paciente comenzó a tomar los nutrientes suplementarios luteína y zeaxantina, que complementaban la ingesta dietética para ayudar a proteger contra el daño oxidativo. También comenzó a tomar Gingko biloba y Vaccinium myrtillus (arándano), los cuales se ha encontrado que mejoran la función visual y el flujo sanguíneo de la retina en pacientes con glaucoma de tensión normal.

El soporte para ser considerado en el futuro incluyó las gotas oftálmicas Cineraria maritima y N-acetilcarnitina (NAC). Cineraria maritima es una planta perenne de la familia Asteraceae, nativa del Mediterráneo. Los extractos de la planta en forma de gotas para los ojos se han estudiado para el tratamiento de las cataratas ya en el comienzo de la 20 ª siglo. Sus efectos curativos se atribuyen a su contenido de potasio y yodo, que se piensa que es importante para la salud de la lente. NAC, cuando se aplica a la superficie del ojo, se metaboliza en la proteína L-carnitina, que tiene un efecto antioxidante en la lente y se ha demostrado que mejora la agudeza visual y reduce la sensibilidad al deslumbramiento en pacientes con cataratas. El paciente también debería ser monitoreado para un mayor riesgo de glaucoma, secundario a la formación de cataratas, lo que podría justificar una intervención quirúrgica más temprana.

RESULTADOS Y CONCLUSIÓN

En la visita de seguimiento de 1 mes, el paciente informó la realización de las terapias recomendadas sin dificultades, excepto que se encargó de aumentar las gotas de aceite de ricino dos veces al día sin efectos adversos. Informó mejora subjetiva en la agudeza visual. El examen visual reveló que, si bien el ojo izquierdo permanecía estable a 20/50, la agudeza visual en su ojo derecho afectado había mejorado de 20/100 (1 mes antes) a 20/70. En el seguimiento de 3 meses, la agudeza visual se mantuvo estable, y el paciente volvió a informar una mejora subjetiva continua en la visión, indicando que era más capaz de ver el reloj de su ventilador.

Nuestro paciente vino a nosotros con el compromiso de realizar el plan de tratamiento recomendado durante al menos 1 año, y entendió la importancia de la consistencia. En las visitas de seguimiento de 1 y 3 meses, estuvo feliz de descubrir que su agudeza visual ya había mejorado. Su caso demuestra que, a pesar de los importantes obstáculos para la curación, el cuerpo, sin embargo, revela su capacidad natural para sanar cuando trabaja de manera simple y diligente en las capas fundamentales de la salud a través de la Pirámide Terapéutica.

Referencias

1. Zeff J, Snider P, Myers SP. A Hierarchy of Healing: The Therapeutic Order. In: Pizzorno J, Murray MT, eds. Textbook of Natural Medicine, Volume 1. 3rd ed. St Louis, MI: Churchill Livingstone Elsevier; 2006: 27-39.
2. Erdurmus M, Selcoki Y, Yagci R, Hepsen IF. Amiodarone-induced keratopathy: full-thickness corneal involvement. Eye Contact Lens. 2008;34(2):131-132.
3. Thylefors B, Négrel AD, Pararajasegaram R, Dadzie KY. Global data on blindness. Bull World Health Organ. 1995;73(1):115-121.
4. Klein BE, Klein R, Lee KE. Incidence of age-related cataract over a 10-year interval: the Beaver Dam Eye Study. Ophthalmology. 2002;109(11):2052-2057.
5. Kuszak JR, Deutsch TA, Brown HG. Anatomy of aged and senile cataractous lens. In: Albert DM, Jakobiec FA, eds. Principles and Practice of Ophthalmology. Philadelphia, PA: WB Saunders Company; 1994: 564.
6. West SK, Valmadrid CT. Epidemiology of risk factors for age-related cataract. Surv Ophthalmol. 1995;39(4):323-334.
7. Asbell PA, Dualan I, Mindel J, et al. Age-related cataract. Lancet. 2005;365(9459):599-609.
8. Jacobs D. Cataract in Adult. 2017. In: Post T, ed. UpToDate. Waltham, MA. Available at: www.uptodate.com. Accessed August 24, 2017.
9. Gaddum JH. Pharmacology. 3rd ed. New York, NY: Oxford University Press; 1949.
10. McGarey WA. The Oil That Heals: A Physician’s Successes with Castor Oil Treatments. Virginia Beach, Virginia: A.R.E. Press; 1993.
11. Di Pascuale MA, Goto E, Tseng SC. Sequential changes of lipid tear film after the instillation of a single drop of a new emulsion eye drop in dry eye patients. Ophthalmology. 2004;111(4):783-791.
12. Goto E, Shimazaki J, Monden J, et al. Low-concentration homogenized castor oil eye drops for noninflamed obstructive meibomian gland dysfunction. Ophthalmology. 2002;109(11):2030-2035.
13. Montés-Micó R. Role of the tear film in the optical quality of the human eye. J Cataract Refract Surg.2007;33(9):1631-1635.
14. Moeller SM, Voland R, Tinker L, et al. Associations between age-related nuclear cataract and lutein and zeaxanthin in the diet and serum in the Carotenoids in the Age-Related Eye Disease Study, an Ancillary Study of the Women’s Health Initiative. Arch Ophthalmol. 2008;126(3):354-364.
15. Bouton S. Vitamin C and the aging eye. Arch Intern Med. 1939;63:930-945.
16. Shim SH, Kim JM, Choi CY, et al. Ginkgo biloba extract and bilberry anthocyanins improve visual function in patients with normal tension glaucoma. J Med Food. 2012;15(9):818-823.
17. Cineraria Maritima. A Modern Herbal, by Mrs. M. Grieve. Botanical.com Web site. http://www.botanical.com/botanical/mgmh/c/cinmar68.html#des. Accessed September 14, 2017.
18. Burdon-Cooper J. Cineraria maritima and the treatment of cataract. Br Med J. 1936;1(3914):85.
19. Dubois VD, Bastawrous A. N-acetylcarnosine (NAC) drops for age-related cataract. Cochrane Database Syst Rev. 2017;28(2):CD009493.
20. Babzizhayev MA, Deyev AI, Yermakova VN, et al. Efficacy of N-acetylcarnosine in the treatment of cataracts. Drugs R D. 2002;3(2):87-103.

Fuente: ndrn