Reivindicación de la identidad científica y autonomía disciplinar de la Naturopatía frente a los esquemas clasificatorios reductores del modelo biomédico
Resumen
Este artículo examina el posicionamiento de la Naturopatía dentro del cambio de paradigma en las ciencias de la salud, reivindicando su estatus como disciplina autónoma, con ontología, epistemología, metodología, tecnología, praxiología y axiología propias. Se cuestiona el uso persistente de términos como “medicina natural”, “terapia alternativa”, “complementaria”, “no convencional” o “tradicional” como etiquetas impuestas que distorsionan la identidad y el alcance científico de la Naturopatía. Desde una perspectiva kuhniana y bungeana, se argumenta que la Naturopatía no se inscribe en el paradigma médico, sino que representa su superación al situar la salud, y no la enfermedad, como eje central de su intervención. Finalmente, se enfatiza la necesidad de consolidar una nomenclatura y taxonomía naturopática propia que respalde su legitimidad epistemológica y profesional en el marco de las Ciencias de la Salud.
1. Introducción: cuando el lenguaje impone límites al pensamiento
La forma en que se nombra una disciplina determina la forma en que se piensa, clasifica y valora. La Naturopatía, a pesar de contar con una historia consolidada, con fundamentos científicos propios y una praxis profesional reconocida en múltiples países, continúa siendo etiquetada con adjetivos ajenos que distorsionan su naturaleza epistemológica: “medicina natural”, “alternativa”, “complementaria”, “no convencional”, “tradicional”, entre otros.
Estas denominaciones no son neutrales. Se enmarcan en una lógica clasificatoria que responde a los límites del paradigma biomédico, desde el cual toda práctica que no reproduce su estructura tecno-científica es colocada en una posición subalterna. Frente a esta taxonomía impuesta, la Naturopatía se sitúa en la superación del paradigma médico como eje central de la salud, desarrollando una ciencia autónoma que desplaza el foco desde la enfermedad hacia la vida, la regulación y el equilibrio vital.
2. Cambio de paradigma: de la medicina centrada en la enfermedad a la ciencia centrada en la salud
El modelo médico dominante —basado en una ontología mecanicista, una epistemología positivista, y una metodología intervencionista— se encuentra hoy en un punto de crisis. Su eficacia en el tratamiento de enfermedades agudas es indiscutible, pero su capacidad de explicar y abordar fenómenos como:
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enfermedades crónicas no transmisibles,
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trastornos funcionales sin daño orgánico visible,
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desequilibrios sistémicos vinculados al entorno social y ecológico,
...se muestra limitada.
Desde la perspectiva de Thomas Kuhn, esta acumulación de anomalías no resueltas abre el camino a un cambio de paradigma. La Naturopatía se inscribe precisamente en ese nuevo horizonte: no como una alternativa, sino como una respuesta epistémicamente distinta. Un paradigma donde la salutogénesis reemplaza a la patogénesis como principio orientador, y donde el profesional actúa como educador de salud, no como ejecutor terapéutico.
3. La Naturopatía como disciplina científica autónoma
La Naturopatía no necesita legitimarse a través de apellidos que la vinculen a la medicina. No es medicina natural. No es terapia. No es alternativa. Es una disciplina autónoma, con estructura científica propia, que puede y debe ser reconocida dentro del marco de las Ciencias de la Salud por los siguientes elementos:
3.1 Ontología Naturopática
El ser humano es concebido como un sistema vivo autorregulado, en constante interacción con su entorno eco-bio-psico-social.
3.2 Epistemología Naturopática
Basada en un enfoque holístico, inductivo, transdisciplinar y contextual, orientado a comprender los procesos vitales en su totalidad, no a fragmentarlos.
3.3 Metodología Naturopática
No interviene sobre la enfermedad, sino que estimula las condiciones internas de equilibrio mediante el uso profesional de agentes naturales (agua, luz solar, movimiento, nutrición, respiración, contacto con la naturaleza).
3.4 Tecnología Naturopática
Instrumentación y protocolos propios para la valoración del terreno vital, el seguimiento del proceso y la adecuación de los medios naturales.
3.5 Praxiología Naturopática
La praxis no tiene finalidad terapéutica en sentido médico, sino salutogénica, educativa y orientada a la autonomía del salutante.
3.6 Axiología naturopática
Se funda en valores como el respeto a la vida, la sostenibilidad, la autodeterminación y la interdependencia, lo que implica una ética de la intervención profundamente humanista.
4. Crítica a la clasificación externa: apellidos que niegan la identidad
El uso de términos como "terapia natural", "medicina alternativa" o "práctica no convencional" responde a una lógica colonial epistémica, donde todo lo que no reproduce los códigos del paradigma dominante es forzado a clasificarse en los márgenes. Esta nomenclatura es sintomática de una resistencia al cambio de paradigma.
Tales etiquetas:
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Reducen la Naturopatía a una función técnica o auxiliar.
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Niegan su capacidad teórica, investigativa y formativa.
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Impiden su incorporación legítima en los espacios de decisión, regulación y política pública.
5. Hacia una nomenclatura y taxonomía Naturopática propia
La taxonomía científica cumple la función de ordenar el conocimiento de acuerdo con sus principios internos, no con categorías externas. Por eso, es urgente seguir consolidandor una nomenclatura Naturopática que refleje:
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Su estatus disciplinar como ciencia de la salud.
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Su campo de acción propio (educación en salud, regulación vital, medios naturales).
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Su diferencia respecto a la medicina, sin jerarquía ni dependencia.
Se propone el uso firme de los siguientes conceptos:
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Naturopatía (como nombre de la ciencia y la profesión).
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Profesional Naturópata (no terapeuta).
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Consulta Naturopática (no tratamiento ni terapia).
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Acto Naturopático (con finalidad salutogénica).
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Agentes Naturales (como tecnología específica).
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Taxonomía Naturopática Funcional y Finalista (según objetivos: regulación digestiva, mejora del sueño, activación circulatoria, etc.).
6. Conclusión: identidad y autonomía como base para el cambio
Nombrar con propiedad es el primer paso para reconocer una ciencia. La Naturopatía se sitúa en la superación del paradigma médico porque propone otro centro de gravedad: no la enfermedad, sino la salud; no el síntoma, sino el proceso; no el cuerpo fragmentado, sino el ser integrado.
El desafío contemporáneo no es integrarse en las categorías del paradigma biomédico, sino consolidar una epistemología Naturopática que dé sentido a su historia, su presente profesional y su futuro científico. La autonomía disciplinar, apoyada en una taxonomía coherente y en una praxis fundamentada, es el camino para alcanzar ese objetivo.
Consultar Diccionario PanHispanico de Naturopatía en www.colegionaturopatas.es

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